Tengo una idea para un talent show: Objetivo Escalpelo.
Las colas para el primer casting podrían ser algo así:
¿Has soñado siempre con ser neurocirujano, pero jamás obtuviste la nota de corte? ¿Rabiabas cuando en tus series favoritas tus héroes y heroínas follaban como locos en camillas olvidadas tras salvar la vida a niños y ancianitas? ¿Siempre quisiste que tu madre presumiera de ti? Esta es tu oportunidad. Si superas las duras pruebas que nuestro jurado te propondrá durante un largo periodo de ocho semanas y aúnas al esfuerzo y tus dotes naturales un carisma capaz de ganarse las simpatías del público, podrás optar finalmente, al gran premio: conseguir tu sueño de ser jefe de servicio de neurocirugía. Objetivo Escalpelo: cumple tu sueño y haz tu propia trepanación.
Sé que por su novedad la idea podría generar controversia (siempre hay esnobs que se niegan a dar oportunidades a quienes no han estudiado; y entre los especialistas médicos, como en otras muchas profesiones, hay mucho gremialismo), pero, finalmente, el criterio mayoritario (que jamás se equivoca), acabará imponiéndose sobre esa mayoría cultureta y elitista que exige ser operada solo por gente que ha ido a la universidad.
Pues ahí está la idea, disponible para productoras experimentadas en la variedad del talent. También tengo otras ideas adaptables al mismo formato: ¿Quién quiere pilotar mi Airbus?, Top Reportero, y Operación Abogado de Oficio.
¿A qué esperan, productores? Anímense. Ahora que la música, la danza, la literatura o la alta gastronomía ya han sido exploradas, ¿por qué no dar algún paso más allá? ¿Van a esperar a que se lo pise la competencia?
Si se puede elegir el cráneo a trepanar yo me apunto. Me temo que van a estar vacíos de cerebro, pero algo habrá: agua, confeti, no sé.
Oye, esa es otra: se puede hacer un casting entre famosetes para que hagan de coballa… Me pido Yola Berrocal…
Tú dando ideas. Y no te extrañe que algún chifleta ya lo haya intentado…
O que poco falte…
¿Y dices que aun no se ha hecho? Pues viendo a algunos médicos de seguros privados me invade la duda, que es un estado inquietante, según Voltaire. 😀
Un abrazo.
jajajaja.
¿Y los calvos con sobrepeso se pueden apuntar o el exceso de tejido adiposo y ausencia de flequillo nos incapacita para ejercer el noble arte de Hipócrates?