Coming soon: La princesa cautiva

29 04 2008

Este sábado (3 de mayo), a las doce de la mañana, en la carpa central de la Feria del Libro de Las Palmas de Gran Canaria, Jorge Liria, Alberto Hernández y yo mismo presentamos La princesa cautiva, la primera entrega de Cuentos del Gallo Tuerto.

No será una de esas presentaciones al uso en las que te aburrimos con reflexiones sobre el libro y te dan ganas de hacernos tragar un cenicero para que nos callemos. Está más bien pensada para los destinatarios del libro: los niños.

Cuentos del Gallo Tuerto es una colección de cuentos pertenecientes a diferentes tradiciones culturales adaptados a los parámetros contemporáneos.

Cada libro dispone de una parte didáctica con propuesta de reescritura por parte del niño, cambiando el género de los personajes, la época o el país en que transcurren; una sección de información sobre el país y la tradición a la que pertenece el cuento y una propuesta de búsqueda de entradas en la web.

Entre los objetivos que persigue, están el acercamiento al repertorio de tradición oral, la práctica de la lectura comprensiva, la reflexión sobre los roles de género y el fomento del diálogo intercultural.

                                                  

Los cuentos los firmo yo, pero en realidad me los ha contado Panchatantra Kid (Pancha para los amigos), que fue expulsado del Real Conservatorio de Gallos, ya que tenía poquita voz, pero desagradable, e inició una carrera como gallo de pelea que se vio truncada por una lesión ocular. Después de esto, se dedicó a viajar por el mundo escuchando cuentos hasta que se encontró con el Coronel O’Flaherty.

Ahora, retirados, viven felizmente en casa del coronel y Pancha tiene todo el tiempo del mundo para releer en su gran biblioteca, nuevas versiones de esas historias que él ya conoce, historias que siempre son las mismas, pero son siempre distintas.





Cada uno cuenta la feria…

29 04 2008

De acuerdo. Hay menos casetas. Y no han colaborado todas las instituciones que deberían haberlo hecho. Además, hay pequeños absurdos, como el hecho de que no se permita a los puestos de los libreros tener a autores en ellos para firmar (cosa habitual y casi imprescindible en las ferias del libro).

Pero hay muchas ventajas: diez por ciento de descuento, actividades lúdicas y musicales, presencia de las últimas novedades (canarias y no canarias), librerías de ocasión y de libros antiguos (donde uno se encuentra pequeñas joyas), presentaciones de libros (para que le cojas el pulso a la literatura que nos viene), degustaciones de especialidades culinarias (en estos días pensaba ponerme a dieta, pero voy a dejar la idea en barbecho) y un ambiente agradable y limpio en el que tanto tú como tus peques pueden pasar un rato muy divertido.

Por otro lado, si, como yo, eres de aquellos que gustan de dejar en evidencia al poder, cuantos más acudamos, más fácilmente quedará demostrado que la institución o las instituciones que decidieron no participar en la Feria cometieron un error garrafal al no implicarse. Y nada molesta tanto a un político.  

Además, el quiosco modernista anda cerca con su terracita para la cerveza fresquita de después de…

Así que ya sabes: Feria del Libro. En el parque San Telmo. Cada día de diez a dos y de cinco a nueve. Hasta el domingo.

PS: Por cierto, esta tarde, a las ocho, leerá allí un mago que encanta serpientes con sus palabras: Félix Martín Hormiga. Tú verás si te lo pierdes. Luego no vengas a quejarte.